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Shareting: subir fotos de hijos a redes sociales: 5 consejos para que compartas contenido sin vulnerar sus derechos

¿Alguna vez has oído hablar de los derechos comunicacionales de niños, niñas y adolescentes? No es un fenómeno emergente. Tampoco una ley reciente. Los derechos comunicacionales existen desde que se sancionó la Convención de los Derechos del Niño el 20 de noviembre de 1989.

Sucede que en los últimos años, con la explosión de las nuevas tecnologías de la información, los derechos comunicacionales de la niñez ganaron una notoriedad que no tenían antes, cuando sólo existían los medios de comunicación tradicionales, como la gráfica, la radio y la televisión.

Los tiempos cambiaron y hoy tienes un medio de comunicación al alcance de tu mano: el celular. Con sus aplicaciones y redes sociales, puedes capturar y compartir cualquier tipo de contenido. Aunque te consideres creador o creadora de contenido, cada vez que compartes información, no solo la produces, también la comunicas a la sociedad.

Esto dio lugar a que un término nuevo comenzara a circular: el Shareting, la práctica de las personas adultas de compartir fotos de sus hijos en internet; lo que en ocasiones conduce a una sobreexposición de niños y niñas. 

Por eso, a la hora de compartir material sobre ellos es importante que tomes en cuenta los siguientes Consejos, que te ayudarán a realizar posteos sin vulnerar derechos comunicacionales de la niñez, como su integridad, su imagen propia y su intimidad familiar:

1. Antes que nada, es fundamental que sepas esto: toda imagen o información sobre niños y niñas que pertenezca a intimidad NUNCA DEBE SER PUBLICADA, ni siquiera entre familiares y amigos. 

Por ejemplo, situaciones como cuando se están higienizando, cuando están desnudos o semidesnudos, cuando van al baño o cuando duermen, entre otras, no deben ser compartidas. No todo es publicable y es importante que tengas claros los límites antes de realizar cualquier interacción en la web.

Las consecuencias pueden ser graves, ya que facilita que los niños puedan sufrir ciberacoso, que suplanten su identidad o que las imágenes sirvan de material para pedófilos. 

Esto aplica a todas las redes sociales. Aunque compartir una publicación en plataformas como Instagram o X (ex Twitter) expone más a los menores de edad, no olvides que en aplicaciones como WhatsApp, la viralización de un mensaje es mucho más rápida y sencilla. Por lo tanto, incluso en estas plataformas, la intimidad de los niños y las niñas no estaría completamente protegida.

2. Si deseas compartir imágenes de niños y niñas que no forman parte de su intimidad, lo ideal es hacerlo solo con tu CÍRCULO CERCANO, es decir, exclusivamente con personas de confianza como amigos, familiares, colegas o allegados.

De todos modos, es importante que elijas con cuidado qué tipo de contenido compartes. Ten en cuenta que la información que subes hoy a la web puede afectar a ese niño en el futuro. Recuerda que existe la huella digital, es decir, todo lo que publicas, incluso entre personas conocidas, queda registrado en el mundo digital de manera indefinida.

Si la imagen o la información es inapropiada, podría generar, con el tiempo, un estrés emocional que afecte su autoestima al relacionarse con otros adolescentes o, incluso, influir negativamente en su capacidad para conseguir empleo en el futuro.


3.Antes de compartir imágenes o información sobre tus hijos e hijas, pídeles su permiso.

Ponte de acuerdo con ellos sobre qué contenido es adecuado para publicar. Al hacerlo, no solo proteges su integridad personal, sino que también les enseñas a usar las redes de manera responsable. 

Conviértete en su guía: si mantienes un diálogo abierto mientras compartes contenido y les pides su consentimiento, les ayudarás a desarrollar criterio y responsabilidad al publicar sus propias imágenes en el futuro. ¡Estarás brindándoles una herramienta valiosa que le servirá toda su vida!

En relación con esto, debes saber que existe lo que se llama el INTERÉS SUPERIOR DEL NIÑO. Esto significa que los niños, las niñas y los adolescentes son titulares de sus propios derechos. ¿Qué implica esto? Que ser su mamá o su papá no te convierte en su dueña, sino en la responsable de velar por sus derechos y proteger su bienestar.

Por eso, recuerda siempre interactuar en la web respetando su voz independiente y su autonomía.


4. Evita compartir imágenes en las que los niños y las niñas aparezcan adultizados.

La adultización de la niñez se produce cuando las familias difunden imágenes que retratan a las infancias con características propias de adultos. 

Te podrás dar cuenta de que un menor de edad está siendo adultizado cuando ves una imagen en la que utiliza ropa, accesorios o maquillajes propio de personas adultas. Otra forma de darse cuenta es cuando percibes que tiene una postura corporal, un discurso y una forma de expresarse que es típica de adultos. 

Compartir este tipo de imágenes es peligroso, ya que puede ser utilizado para fines como la pornografía infantil, el ciberacoso, el ciberbullying o la cibersuplantación de identidad. 

Sin embargo, no se trata sólo de peligros…imponerles a los niños características adultas anula su voz propia: su visión del mundo, su subjetividad y su inocencia. 


5.Comparte imágenes que reflejen su verdadera esencia

El último consejo está relacionado con un concepto clave al hablar de infancias y medios de comunicación: la perspectiva de niñez

Los niños y las niñas tienen capacidades, pensamientos y miradas sobre la realidad que pueden resultar geniales; el problema es que nuestra perspectiva adultocéntrica nos impide verlo. Ponemos nuestra propia visión en el centro, les imponemos esquemas en los que deben encajar y nos olvidamos de la maravillosa etapa de niñez que están atravesando.

Por eso, intenta no poner el foco en comunicar que tu hijo es “extraordinario”, “productivo” o que tiene logros y pensamientos “de persona grande”. No trates de comunicar que tu hijo es especial, sino más bien intenta transmitir lo especial que es para ti. 

Comparte imágenes que muestren lo buen compañero o compañera que es, su cariño hacia los animales, su pasión por los deportes, su interés por la cocina, el disfrute que siente al bailar y su creatividad.

Si deseas compartir videos, elige aquellos que reflejen los avances en actividades o sus nuevos aprendizajes en el colegio. Aprecia su recorrido, no sólo los logros y los éxitos. 
Es positivo que sean sanamente competitivos, pero también lo es que sean buenos compañeros y disfruten de lo que hacen…que vayan camino a convertirse en personas íntegras, empáticas, responsables y saludables para la sociedad.

FUENTES CONSULTADAS: 

Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) (2015). “Trabajo Monitoreo Niñez y Adolescencia en Magazines de la TV Abierta”

Sanchez Nadal, M.V. (18 de febrero de 2021). Subir fotos de tus hijos a las redes perjudica a los menores y beneficia a las grandes tecnologías. El País. https://elpais.com/tecnologia/2021-02-17/subir-fotos-de-tus-hijos-a-las-redes-perjudica-a-los-menores-y-beneficia-a-las-grandes-tecnologicas.html

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